Simples chozas, que cuentan una larga historia

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Zapotlanejo, Jalisco.- En la carretera que conduce de Zapotlanejo a Tototlán, pasando Zorrillos y entrando varios kilómetros hacia la derecha existe un pueblo llamado El Durazno, que encierra grandes misterios.

En Matatlán, ya hace 8 años hicimos varias publicaciones de viejas haciendas y cuevas, que tienen historia desde la época cristera, y El Durazno, también tiene la suya.

Casas de adobe y teja, que el paso del tiempo se ha encargado de erosionar a tal grado que de algunas ya se encuentran solo algunas paredes, son testigos vivientes de la historia.

Tal vez se podrían preservar, porque seguramente cada casa cuenta la historia de toda una familia que ha forjado a Zapotlanejo.

Para muchos puede parecer una simple casa, para otros, es la raíz de su vida, y representan cientos de historias dignas de contar.

Esto es la representación de lo que significaba la vida en el rancho, como muchos lo mencionan.