Tema prohibido: Piden lo que tampoco quieren dar

Por Daniel Ontiveros

Todo mundo ahora habla de la igualdad de los homosexuales, de la tolerancia, del respeto a sus derechos, hasta se ponen de colores sus perfiles en Facebook, pero de la tolerancia de los homosexuales hacia el resto, eso es un tema prohibido.

Hace poco platicaba que los matrimonios en personas del mismo sexo, así como las adopciones que pueden realizar, nosotros los mayores no los veíamos como normal, pero las nuevas generaciones lo verán como algo normal, y no veo problema.

En estos tiempos de debate del respeto hacia los  matrimonios de personas del mismo sexo y la adopción, mantienen en constantes manifestaciones  de los religiosos,  los homosexuales, y hasta los que están neutrales, dando su firme su postura y exigiendo cada quien sus derechos.

En cuánto un gay se siente criticado, lanza amenazas de que sus derechos no son respetados, de homofóbicos, de que los demás deberían verlos como otra persona exactamente igual, y  juzgan a los contrarios de ignorantes, retrógradas, tapados, entonces ¿dónde queda la tolerancia y el respeto del otro lado?

Supongo que las ideas por parte de ambos bandos deben ser respetadas, y cada quién muestre sus argumentos, pero a las partes defensoras y en contra de estos nuevos derechos, se faltan al respeto con cada día que pasa.

En las redes sociales se desgarran las vestiduras todo mundo porque se respeten los derechos de todas las personas por igual, y en cuánto alguien crítica (¡ojo! solo estoy hablando de los que critican, los fanáticos locos que ofenden, es asunto aparte), de inmediato es atacado y lo tachan de un mil de cosas.

Pero en la calle es distinto, cuántas de esas personas que escriben en su muro de defender los derechos de los homosexuales, en cuanto ven a una pareja en la calle, la critican, la viborean, y de aberrantes no los bajan, la doble moral ante todo. O se respeta o no se respeta, ¿por qué solo hacerlo a medias?.

En lo personal, no tengo ningún problema, respeto las preferencias de cada persona, y como he dicho: cada quién su vida, y que hagan lo que quieran, pero se deben de tolerar las ideas de los demás, cosa que muy pocas veces sucede.

Son una minoría sí; son atacados sí; son respetados, eso es algo en lo que hay mucho trabajo por hacer, pero si ellos y ellas no comienzan por respetar también, seguirán viéndolos mal y criticándolos por mucho tiempo.

Que se sientan expuestos ante la sociedad, es como a cada quién le va en la feria, pero es necesario que todas las partes en conflicto muestren sus ideas, y escuchen a la parte contraria, sin atacarse y entrar en fanatismo y en la borregada.